Las medidas que podemos tratar de poner en marcha para optimizar el rendimiento de nuestro PC con Windows son muchas. Desde utilizar programas de terceros a tratar de hacer uso de herramientas propias del sistema operativo de Microsoft para que todo vaya como la seda. Un gran ejemplo de esto último es el llamado «modo eficiencia», una herramienta útil para evitar saturar tu ordenador.
El modo de eficiencia se introdujo en Edge para poner las pestañas inactivas en reposo de forma inteligente. Ahora, los desarrolladores de Windows lo han hecho parte del
La activación del modo de eficiencia debería ayudar a mejorar el rendimiento del sistema, así como también a reducir el consumo de la batería y bajar la temperatura en caso de que estemos usando un portátil. Todo ello directamente desde Windows y sin necesidad de recurrir a un programa de terceros o de tener que abrir el de tareas para finalizar procesos uno por uno.
Además, como decíamos anteriormente, el modo eficiencia deja los programas en suspensión y no mata dichas tareas, lo que podría producir errores al dejar algunos procesos en segundo plano finalizados.
«El objetivo es dar a los s avanzados el control del consumo de recursos del proceso y contribuir a la iniciativa de software sostenible de Microsoft. En un nivel alto, el modo de eficiencia del de tareas limita el uso de recursos del proceso al reducir la prioridad del proceso y garantizar que se ejecute de manera eficiente en la U al aprovechar EcoQoS».
EcoQoS (Eco Quality of Service) garantiza que el proceso se ejecute de la manera más eficiente desde el punto de vista energético. Esto podría significar ejecutar el procesador a una frecuencia más baja para ahorrar energía y ayuda a mejorar la huella térmica de la U.
«Los resultados muestran que configurar el modo de eficiencia en la carga de trabajo de la U mejora enormemente la capacidad de respuesta del sistema en un 14 % ~ 76 % en los escenarios comunes que probamos».