Microsoft lleva un tiempo explorando todas las opciones que existen para conseguir que su sistema operativo sea mucho más ligero y rápido, a partir de una mejor optimización del mismo. Uno de los cambios ha sido reducir considerablemente el peso de sus actualizaciones en Windows 11. Una política que también va a aterrizar en la versión 10.
El peso de las actualizaciones de nuestro sistema operativo nos pueden provocar ciertas ralentizaciones y problemas de rendimiento en nuestros equipos. Microsoft, conscientes de esta situación, lleva tiempo trabajando en optimizar al máximo los paquetes de actualización para evitar este tipo de situaciones. En Windows 11, de hecho, llegó a reducir el tamaño de las actualizaciones de seguridad y experiencia de hasta en un 40%.
Una vez asentado este cambio, ahora es turno de Windows 10 en la versión 22H2. La compañía tecnológica está incorporando un sistema de actualizaciones muy similar al que usa en Windows 11 para poder reducir el tamaño de las nuevas versiones disponibles y que estas sean mucho más sencillas a la hora de descargarlas. Imprimiendo una mayor velocidad en todos sus dispositivos.
versiones de Windows que ya llevan un tiempo en el mercado, pero que continúan teniendo una gran cantidad de s en todo el mundo.