Con la fibra óptica en plena expansión, tecnologías más obsoletas cada vez tienen menos cabida. Teniendo esto en cuenta, ¿cuánta vida le debe quedar al ADSL? ¿Será 2023 el año en el que desaparezca definitivamente?
El año pasado acabó con muchas centrales de cobre, pero todavía quedan muchas más por apagar. Aun así, independientemente de esto, operadores con tanta importancia como Movistar prevén que para 2024 ya no haya ni un solo cliente de ADSL en España.
Telefónica cerró 800 centrales de cobre en 2022
Telefónica ha cerrado el año que acaba de finalizar con casi 800 centrales menos de cobre, lo que supone el 26% de las 8.500 que tenía la empresa en España,
La teleco espera que, independientemente de que todavía queden infraestructuras que le den soporte, no quede ningún cliente de ADSL para 2024. La operadora quiere que en abril de 2024 todos sus clientes de Internet fijo sean de fibra y poder así apagar su red de cobre en toda España y, de esta forma, reducir en hasta un 20% su consumo energético, algo que con el precio de las energías en los últimos tiempos resultará crucial para reducir gastos y cuadrar cuentas. Además, la compañía consume 1,7 Gigavatios al año, lo que representa el 0,7% de la energía del país y convierte a la empresa en uno de los diez máximos consumidores de energía de España.
2023 no será el año del apagón total del ADSL, pero sí el que anuncie su muerte. Todavía son varios los lugares donde todavía no ha llegado la fibra óptica, principalmente en zonas rurales o remotas, pero para el año 2025, toda España debería tener cobertura de fibra óptica, para lo cual el Gobierno de España ha lanzado varios planes de ayudas para que los operadores puedan desplegar sus equipos en zonas de menor rentabilidad o de más difícil , como pueblos con un bajo número de habitantes o con casas muy dispersas.