Ayer fue presentado el OnePlus 5, el último modelo de la compañía asiática, que normalmente ofrece características punteras a un precio muy ajustado. Este año la compañía ha hecho un buen móvil, pero con una serie de fallos que lo dejan por detrás de la competencia. Y si a eso le sumamos que ha subido el precio, se difumina la línea que les separaba de las grandes marcas del mercado.
¿Por qué sube de precio el OnePlus 5?
El OnePlus 3T se vendía con un precio base de 439 euros. Con cada nueva versión de móvil, OnePlus ha ido subiendo ligeramente el precio conforme iban optimizando mejor el software. Ahora, nos encontramos con un móvil que parte de los 500 euros. Aunque es uno de los precios más bajos de un móvil con Snapdragon 835, no deja de ser más elevado de a lo que nos tiene acostumbrados la compañía. Equipar cámaras buenas, tantos GB de RAM y usar el último procesador no es lo más rentable para ofrecer un precio bajo.
Además, el tamaño de píxel (1,12 µm y 1.0 µm en la de 16 y 20 MP, respectivamente) es realmente pequeño frente a otros fabricantes, lo que hace que en escenas de baja luminosidad su calidad no sea suficiente. Además, algunos análisis apuntan que al OnePlus 5 le cuesta enfocar en escenas de baja luz, probablemente debido a que al sensor no le llega la suficiente luz. Por si fuera poco, la cámara zoom no es un zoom óptico 2x real, sino que es óptico 1,6x, y el 0,4x restante lo consiguen con zoom digital.
OnePlus engaña en los benchmarks con el OnePlus 5
Por último, parece que OnePlus ha estado manipulando el código de las unidades enviadas para análisis, lo cual hace que el teléfono rinda falsamente de más en las pruebas de rendimiento para obtener una mejor puntuación, lo cual no se ve reflejado en el uso diario del móvil por parte de los s. Entre las aplicaciones afectadas, encontramos las siguientes, por lo que si veis una prueba de rendimiento de ellas del OnePlus 5, cogedla con pinzas:
- AnTuTu
- Androbench
- Geekbench 4
- GFXBench
- Quadrant
- Nenamark 2
- Vellamo
La subida de potencia temporal genera que el móvil obtenga un 5% más de rendimiento, y durante las pruebas, su temperatura sube hasta los 50 grados, haciéndolo imposible de mantener en la mano. OnePlus se ha defendido de estas acusaciones diciendo: “nosotros no estamos haciendo overclock al móvil, sino que más bien estamos mostrando el potencial de rendimiento que puede llegar a alcanzar el OnePlus 5”. De igual manera, en enero se pilló a la compañía engañando con las pruebas de rendimiento del OnePlus 3T.
En definitiva, estamos ante un móvil que podría haber sido mucho más, pero que se ha quedado a medio camino. No obstante, algunas de sus prestaciones sí son dignas de loa, como contar con 6 y 8 GB de RAM para una gran experiencia multitarea, carga rápida con Dash Charge (aunque se echa en falta carga inalámbrica, la cual no puede introducirse por la trasera de aluminio), una única versión global del móvil (nada de bandas recortadas por zonas), Snapdragon 835, Gorilla Glass 5, un lector de huellas que tiene un retraso de sólo 200 ms, Bluetooth 5.0 y batería de 3300 mAh.
A nivel de precio, el Xiaomi Mi6 es el móvil con Snapdragon 835 más rentable, y puede encontrarse en diversas ofertas por 350 o 400 euros. Con este OnePlus 5 se nota que han recortado ciertas características para evitar tener que subir más el precio. El trono de mejor móvil al mejor precio ya no lo ocupa OnePlus.