Huawei ha presentado recientemente sus nuevos Huawei P10 y P10 Plus, los cuales no aportan nada que no hubiéramos visto antes, en un 2017 que va a destacar por móviles plagados de innovaciones, como las que ya hemos visto con el LG G6, y que más adelante vamos a ver con el Galaxy S8 el próximo 29 de marzo.
Huawei tiene malas ventas en los móviles de gama alta
Estos móviles anodinos y cuyos precios no son un reflejo adecuado de sus prestaciones parece que tampoco gustan mucho en el mercado. Si bien la gama media no va del todo mal, la gama alta presenta problemas en niveles de ventas, los cuales no están siendo como esperaban desde la compañía china.
Según apunta Reuters, la compañía les respondió que en estos momentos no tienen ningún plan de despido programado, no haciendo ninguna declaración más allá de esa. En otro email que mandaron en Navidad, Huawei comentó que no iban a tolerar trabajadores ineficientes, y que iban a despedir a supervisores que no hubieran mejorado sustancialmente su zona de trabajo a lo largo de sus años en el puesto. Además, informaban de que iban a controlar cada detalle y a cada empleado a nivel de costes para asegurarse de un desarrollo sólido y eficiente.
Este control de costes llega después de un 2016 en el que recortaron el dividendo por acción, además de gastar millones en marketing para contratar a Messi, Scarlet Johannson o Henry Cavill con el objetivo promocionar sus móviles, en una estrategia que no les reportó una ganancia de mercado como ellos esperaban. De cara a 2017, reducirán los gastos en marketing y aumentarán en I+D. La empresa espera así alcanzar a sus competidores, aunque lo tiene difícil si no va a promocionar apenas sus dispositivos.