Cada día, cuando encendemos el ordenador, raro es el que no se conecta a Internet. De hecho, es algo que el equipo suele hacer de forma automática cada vez que lo encendemos y encuentra una red WIFI de confianza que ya tenemos guardada como puede ser la de nuestra propia casa y más aún si estamos conectados a través de cable. Mientras navegamos por Internet podemos hacer múltiples tareas, como la descarga de datos, consultar el correo, las redes sociales o jugar online a nuestros títulos favoritos, entre otras muchas cosas. Sin embargo, en ocasiones podemos ver como nuestra conexión va más lenta de lo habitual y se nos complica el poder hacer todo esto que queremos.
Las razones pueden ser muy diversas, pero para poder detectar la causa, o al menos hacernos una idea de lo que puede estar ocurriendo, vamos a tener que comprobar el estado de nuestra conexión, la actividad en tiempo real, conexiones en segundo plano, las establecidas por el equipo, como
Si además en alguna ocasiones queremos guardar los resultados devueltos por NETSTAT a un fichero de texto, también lo podemos hacer mediante el comando NETSTAT [parámetros] > nombrefichero.txt. Un ejemplo sería, NETSTAT –abf > conexiones.txt, que nos creará un fichero de texto con el nombre conexiones en la ruta donde hayamos ejecutado el comando. Para controlar y monitorizar la transferencia de paquetes también podemos usar el sniffer oculto de Windows 10.