Sin duda, el teléfono móvil se está convirtiendo cada vez más en el dispositivo más utilizado por los s para realizar todo tipo de cosas. Desde hace tiempo se ha convertido en el principal terminal desde el que nos conectamos a Internet para navegar, leer noticias, consultar el correo o las redes sociales y aunque ya se está utilizando, en un futuro podría ser parte del método de pago más utilizado sustituyendo a nuestras tarjetas de crédito.
Hasta entonces, las tarjetas less tanto de débito como de crédito son las que tratan de asentarse en el mercado de los métodos de pago aprovechándose de las nuevas tecnologías, ya que en este caso se apoyan en la comunicación inalámbrica y el uso de NFC, la tecnología en la que se basan también los pagos móviles.
utilizar métodos más seguros, que ofrezcan ventajas a los clientes y reduzcan la posibilidad de fraude. En cualquier caso, una aplicación que aparentemente puede no ser maliciosa, podría aprovecharse de su proximidad con una tarjeta less para leer los datos de nuestra tarjeta, mandarlos a otro smartphone y desde éste realizar compras por cantidades inferiores que no requieren de validar con un PIN, que se establece en menos de 20 euros.
De esta misma manera, dado que el campo de acción de una tarjeta NFC se limita entre los 10 y 20 centímetros, los delincuentes podrían usar diferentes artimañas para robar los datos de nuestras tarjetas en sitios de masificación o aglomeración de gente donde la distancia se podría reducir considerablemente sin que nadie sospeche. Una vez nos han robado los datos, el delincuente podría pagar algo realizando el cargo a una tarjeta que puede estar a miles de kilómetros de distancia.
Hechos que por supuesto preocupan a los s, pero los bancos están tratando de quitar hierro al asunto asegurando que se está trabajando para solucionar estos problemas y ofrecer a los clientes una forma de pago cómoda y segura. Por el momento, debemos tener cuidado con nuestras tarjetas y evitar este tipo de situaciones.