El sector de las telecomunicaciones está en constante evolución y los avances que se producen en el mismo tienen incidencia en muchas otras áreas debido por ejemplo a los cambios que se producen en la asignación del espectro de frecuencias en nuestro país para servicios de telefonía móvil, televisión o comunicaciones de rango corto. Vamos a repasar cómo están atribuidos cada grupo de frecuencias y qué cambios se esperan para el futuro.
El 10 de abril de 2015 se publicó la orden IET/614/2015 que planteaba un importante cambio en el asignación de las frecuencias del espectro radioeléctrico en España. El objetivo de estos cambios era armonizar todo el espectro tras el importante cambio dado al conceder al 4G la banda de los 800 MHz que hasta finales de 2014 venía siendo ocupada en exclusiva por la Televisión Digital Terrestre. Pero no solo la banda ancha móvil y la TDT conviven en las ondas, sino que multitud de servicios públicos deben coexistir también y proveer de asistencia e información a los ciudadanos y a la istración del Estado, por lo que vamos a ver algunas de las frecuencias clave para nuestro día a día.
Las bandas susceptibles de ser atribuidas en nuestro país clasifican los distintos servicios desde el espectro inferior que compren los 8,3 kHz (las primeras atribuidas) hasta los 3000 GHz, aunque a partir de 275 GHz no están licenciadas por el momento. Hay que tener en cuenta que la repartición de las mismas también depende de cada tecnología, ya que algunas como los radares más avanzados requieren de las frecuencias altas, mientras que otros servicios como la la navegación submarina necesitan del espectro inferior debido a su operatividad en el mar.
El espectro superior de 890 MHz a 3000 GHz
Las bandas de frecuencias superiores están muy fragmentadas y albergan todo tipo de servicios de telecomunicaciones, aquí encontramos en la parte superior el espectro dedicado a la radioastronomía, la investigación espacial, o la radionavegación aeronáutica. Pero también son las bandas de otros servicios de telefonía que operan en estas frecuencias licenciadas.
No hay que olvidar a demás que este es el hogar además de las frecuencias soportadas por los principales estándares WiFi: en los 2,4 GHz por tecnologías como 802.11b, 802.11g y 802.11n, y en 5 GHz por las de 802.11a y 802.11n. Además, hay que recordar que los 2,4 GHz son usados por una gran gama de dispositivos de corto alcance.
Habrá que estar atentos a los cambios que se introducen de nuevo en esta configuración a raíz de la liberación del dividendo digital que se llevará a cabo en apenas unos años.