Un grupo de investigadores han desarrollado un método para obtener las claves de cifrado con sólo tocar las partes metálicas de un ordenador, incluyendo conectores Ethernet, VGA o USB. Esto es posible al medirse la fluctuación de energía del procesador mientras el software de cifrado está operando.
Existen diferentes métodos para atacar los sistemas de cifrado. En primer lugar nos encontramos con las propias carencias de los algoritmos utilizados para construir las claves, que posibilitan el descifrado de una forma más o menos sencilla según el caso. En otro orden, tenemos los errores humanos a la hora de establecer una contraseña que cumpla ciertos parámetros de seguridad para considerarse aceptable.
Entre estas dos cosas, nos encontramos con un tipo de ataques que no se centran en los algoritmos o fallos humanos, si no en la forma en que ese método de cifrado ha sido implementado. Medir el tiempo necesario para realizar las operaciones de cifrado o analizar el rendimiento de la caché del sistema, pueden servir para posteriormente conseguir las claves mediante un ataque de canal general.
seguridad informática de la Universidad Stony Brook, ha declarado que existen decenas de este tipo de métodos que aún no han sido descubiertos.